Salsa de soja

Se dice que la salsa de soja para los Chinos, se puede comparar a un buen vino Europeo, tanto por su variedad y buen gusto, como por lo común de su uso en la cocina,  para la preparación de recetas especiales tanto del lejano Oriente como  de otras culturas. Una gran variedad de salsa de soya provienen de países como China, Japón, Vietnam y Corea quiénes, son grandes productores de este esencial producto de la cocina.

La fermentación

La salsa de soja, es un condimento, que se obtiene de la fermentación, de granos de la soja, mezclado con agua, el cual da un resultado totalmente natural, para obtener una pasta que se prensa, elaborada con procedimientos, que puede durar unos seis meses,  para dar lugar a dos subproductos: un producto líquido y otro producto sólido.

El producto sólido, normalmente se suele desechar o utilizar como alimento para los animales y el producto líquido, que queda del proceso de la fermentación, se le añade sal y se filtra, obteniéndose una salsa de color oscuro, con un aroma que integra el salado con la soja.

Tipos de salsa de soja

Entre algunas de las salsas ligeras chinas se encuentran: el exquisito Tamarí japonés, la oscura salsa taiwanesa, la salsa de soja con aroma de setas (hongos)de shiitak,  la salsa de soja dulce, la salsa de soja común, la salsa de soja sin gluten, entre muchas otras variedades.

Los tonos del color de la soja, pueden variar y en algunos casos suelen ser más oscuros y más espesos y en otros, las salsas pueden ser de color marrón claro.

Elementos  esenciales

La salsa de soja, está compuesta de Ingredientes esenciales, que son el agua, el trigo, la soja y la sal, los cuales suelen ser los elementos básicos en su aroma y color que durante el proceso de calentamiento y cocción producen un efecto único al mezclarse con otros alimentos, haciendo intenso su aroma y creando un color especial a las comidas, que despierta el apetito del menos exigente.

Con el ingrediente de la sal, la salsa de soja, se convierte en un producto estable que no requiere refrigeración para conservarse,  gracias a la protección de la sal que contiene y puede durar muchísimo tiempo. Igualmente, el contenido de la sal, no tiene que ser necesariamente en la misma proporción para todas las elaboraciones, lo cual indica que algunas salsas de soja, puedan ser más saladas y otras menos saladas.

Sin aditivos

La salsa de soja destaca además por ser, cien por ciento natural y no contener ningún compuesto artificial como, colorantes,  conservantes,  químicos, ni aditivos,  lo cual la hace un ingrediente sin igual en la cocina nacional e  internacional.

Este producto de la cocina Oriental, también se puede encontrar con mucha frecuencia en las cocinas occidentales actualmente y se ha convertido en un ingrediente necesario, para la cocina en la preparación de sopas, caldos y todo tipo de recetas con verduras, carnes y pescados.